¡Derogatoria de la Ley Chlimper ahora!

Los trabajadores y las trabajadoras agrari@s están en huelga desde el 30 de noviembre, contra el sistema de esclavitud moderna implantado por la Ley Chlimper y su régimen especial agrario hace veinte años, cuya vigencia ha sido prolongada por los sucesivos gobiernos. 

La Ley N° 27360, llamada Ley de Promoción al Sector Agrario, fue promulgada por la dictadura fujimorista poco antes de su caída, el 30 de octubre del año 2000, impulsada por su entonces Ministro de Agricultura, José Chlimper Ackerman, poderoso empresario agrario. Esta norma despoja de todos los derechos laborales a los trabajadores y trabajadoras de la agroindustria. 

Seis años después, el 21 de julio del 2006, el prófugo Alejandro Toledo prolongó su vigencia hasta el 31 de diciembre del año 2021 (Ley N° 28810). Y el 29 de diciembre del 2019, Martín Vizcarra, también investigado por corrupción, lo hizo mediante Decreto de Urgencia N° 043-2019 hasta el 31 de diciembre del 2031. Es decir, diez años más de explotación.

Una explotación que se ha visto agravada por la pandemia, porque, sin derechos laborales y sueldos paupérrimos, menores al sueldo mínimo, jornadas de hasta 17 horas, los trabajadores y trabajadoras agrari@s no tienen acceso al servicio de salud, a seguros ni a bonificaciones en caso de enfermedad o muerte.

Mientras se otorgan estos beneficios a los grandes empresarios agrarios, cuyas plantaciones se constituyen en latifundios más grandes que las haciendas existentes antes de la Reforma Agraria, la agricultura de nuestras comunidades está abandonada. Luego de perder nuestras cosechas por falta de salida a los mercados para nuestros productos, sufrimos ahora la sequía más grave desde el año 2002 e intensas heladas que ocasionan la pérdida de nuestros cultivos y la muerte de nuestro ganado. Además de sufrir enfermedades por el frío y la falta de agua.

La seguridad y soberanía alimentarias están en alto riesgo, no solo en las regiones afectadas sino en todo el país, porque peligra el abastecimiento del 70% de alimentos que llegan a las mesas de los hogares peruanos.

Urge ayuda, sí, pero también diseñar e implementar políticas preventivas frente a un fenómeno recurrente, producto del cambio climático causado por un sistema depredador de la Madre Naturaleza. No es posible que año a año se produzcan estos desastres climáticos y el Estado no se preocupe por realizar acciones preventivas, en coordinación con las comunidades. 

Frente a ello, ONAMIAP exige:

• La derogatoria inmediata de la Ley Chlimper y sus modificaciones, que prolongan la vigencia de nefasto Régimen Especial Agrario.
• Declarar la agricultura familiar en emergencia a nivel nacional.
• Diseñar, con participación de las organizaciones indígenas, políticas preventivas y de reparaciones contra los desastres climáticos.
• Convocar a una Asamblea Constituyente Popular, Soberana, Plurinacional y Paritaria, que construya una nueva Constitución Política que acabe con los privilegios de los grandes empresarios y garantice los derechos colectivos e individuales de todos y todas.